sábado, 17 de abril de 2010

SERICAIA Y ME DESPIDO POR UNOS DIAS

El lunes nos vamos a hacer el Camino de Santiago. Muchos de vosotros sabéis que el año pasado ya hicimos un tramo, el de Astorga a Santiago, de 260 Km., este año pensamos hacer Roncesvalles- Burgos, con una distancia similar en kilómetros, aunque con un paisaje muy diferente. Antes de irme os quiero dejar una receta: La Sericaia.
La Sericaia, Serica o Cericaia es un postre portugués muy típico en la región del Alentejo, concretamente de Elvas,. Hay quien dice que esta receta fue traída por un gobernador portugués de la India del s. XVI, otros ven su origen en Brasil. Lo cierto es que hoy ocupa un lugar de honor en la gastronomía elvense y puede encontrarse en todos los restaurantes de la ciudad y en la mayoría de las pastelerías. A nosotros nos gusta especialmente la Sericaia de la pastelería A Cantarinha. Es típico tomar la Sericaia con ameixas, las ameixas son unas ciruelas almibaradas típicas también de esa población.

Vamos con la receta:

Ingredientes:

½ litro de leche

6 huevos

65 gr. de harina

225 gr. de azúcar

Una cucharada sopera no muy llena de canela en polvo

1 barra de canela

La corteza de un limón

Una pizca de sal

Elaboración:

Batir las yemas con el azúcar hasta obtener una crema suave

Hervir la leche con la corteza del limón, el palito de canela y la sal. Antes de que rompa a hervir añadir la harina tamizada, revolver y dejar cocer un par de minutos. Por último añadir las yemas y seguir otros tres minutos en el fuego, sin dejar de revolver

Retirar y dejar enfriar, sacar el palito de canela y las cortezas de limón. Si hubiera quedado algún grumo, darle unos golpes de batidora.

Montar las claras a punto de nieve y añadir suave y envolventemente a la crema anterior, que ya debe estar fría.

Con cuchara grande colocar la masa en el recipiente de barro, desde el centro a los extremos formando un sol, luego de los extremos al centro rellenando los espacios que han quedado,

esto se hace para que al cocer se abran “fendas” (grietas).

Espolvorear la canela en polvo por encima e introducir en el horno, precalentado a 180º. Cuando se empiecen a abrir “fendas” bajar el horno a 150º para que se cueza por dentro. Estará a punto, cuando al introducir una brocheta en el pastel, esta salga limpia.

Es bueno tomarlo casi frío, pero aún un poco templado.

Nota: El molde adecuado para hacer la Sericaia es el de barro, como el de la foto, si no se dispone de uno, utilizar un recipiente similar que pueda ir al horno.

Fuente: Recetas de la cocina portuguesa.

¡HASTA PRONTO!

miércoles, 7 de abril de 2010

¡¡¡ALCACHOFAS PARA EL VERANO!!!


Cuando era pequeña, me gustaba que me contaran las fábulas de La Fontaine, especialmente la de “La Cigale et la Fourmi”,

"Cantando la Cigarra pasó el verano entero,

sin hacer provisiones allá para el invierno;

los fríos la obligaron a guardar el silencio

y a acogerse al abrigo de su estrecho aposento…"

Mientras me leían esta fábula una y otra vez, pensaba yo: “cuando sea mayor me divertiré como la cigarra pero dedicaré algún ratito a hacer provisiones como la hormiga”. Bueno y eso es lo que he hecho hoy, aprovisionar para el verano.

En casa nos encantan las alcachofas, tanto añadidas a la paella, como con pasta, en guisos de carne… Dado que es una hortaliza de invierno, en verano no la podemos poner en nuestros platos, bueno no la podríamos poner, pero como yo soy hormiguita y almaceno, pues ¡problema resuelto!.

Como veis hoy no publico una receta, si no una forma de aprovisionar esta hortaliza para los próximos meses.

Cuando las alcachofas estén en su mejor momento y con un precio asequible, comprar unos cuantos kilos.

Elaboración:



Cortar y limpiar las alcachofas, prescindir de todas las hojas que consideremos vayan a endurecer el resultado final, cortarlas en cuatro u ocho trozos dependiendo del tamaño. Freírlas en aceite y un poco de agua,

ATENCIÓN: No colocar sobre el gas la sartén con el aceite y el agua solas, se podía incendiar, sólo se acercará al fuego con el aceite el poquito de agua y las alcachofas crudas.

Freír con sal a fuego medio hasta que veamos que están blanditas.

Entonces retirar y poner a escurrir.

Ya frías se envuelven en porciones en papel film,


se etiquetan y se guardan en congelador.
Ya tenemos alcachofas para todo el verano.

Nota: Yo suelo hacer tres tandas de 5 K., que una vez limpias quedan en 1.500 gr. aproximadamente cada una, y así
podemos disfrutarlas en verano en las ricas paellas que hacemos en la barbacoa.

Fuente: Familiar