domingo, 11 de noviembre de 2012

LLEGÓ MI AIG


¡Dios mío qué ilusión!, que sería la vida sin estas pequeñas alegrías.

Puntualmente la semana pasada  llego el regalo de mi AIG, sólo al ver lo meticulosamente que estaba 
envuelta la caja ya supe del cariño con que se había preparado mi regalo, y al destaparla y ver todos los paquetitos envueltos en papel de una misma colección en diferentes colores ya no tuve ninguna duda.

Pero los regalos superaron con creces mis previsiones, todos ellos giran de una u otra forma alrededor de un ingrediente: EL CHOCOLATE. 


Empezando por una preciosa y práctica caja a la que ya he dado utilidad, un bonito tarro de cristal que contenía unas brownies cookies de las que ya no queda ni una, un "serving plate" blanco de tres pisos que ya he estrenado presentando trufas de diferentes tipos, un pincho de brocheta para ver si los bizcochos están cocidos, una bolsita con sésamo garrapiñado, un agarrador de cocina, servilletas con motivos de chocolate, un libro ¡como no, con recetas de chocolate!, adornos para mis galletas, una taza con su cucharita para tomar mi chocolate calentito y un adorno navideño en forma de corazón.

Y ¿quién me ha mandado todas estas maravillas?, pues Vanessa del blog El recetario de Lady Halcón, gracias Vanessa por el cariño que has puesto en preparar todos mis regalos, me ha gustado todo, todo, todo y también tu bonita carta, espero que a partir de ahora sigamos en contacto y que si un día vienes por Barcelona podamos conocernos.

También quiero agradecer de nuevo a Joana de Mis recetas bordadas todo el trabajo que se ha tomado en preparar esta edición del AIG 2012.

jueves, 1 de noviembre de 2012

GALLETAS DE ENEBROS


Ya estamos en la Fiesta de Todos Santos y este año fresca, fresca, por lo menos aquí en La Cerdaña, estos días nos hemos levantado a  -6º y nos hemos acostado alrededor de los 0º.
 
 
Ha nevado, las montañas que tengo ante mis ventanas están blancas,  me recuerdan a la glasa de decorar galletas. En el pueblo también ha nevado pero el sol intenso del mediodía ha derretido toda la nieve.
 
Es una época preciosa, los árboles se tiñen de tonos ocres y rojizos.
 
 
El colorido de los crisantemos adorna la mayoría de las tiendas, el aroma de los membrillos inunda los lindes de los senderos. Época
 
 
de castañas de panellets, de calabazas... Esta noche los niños llaman a las puertas pidiendo caramelos, los amigos nos reunimos en las casas a la luz de la lumbre para asar castañas y boniatos y para comer los panellets que normalmente se preparan la misma tarde.
 
Este año además de todas esas cosas típicas he preparado unas galletas de enebros, de la que os voy a dejar la receta.
 
Normalmente en verano recogemos "ginebrons" (enebros en catalán), para preparar la ginebra casera, este año al no haber llovido nos quedamos sin cosecha, pero anteayer aprovechando que
 
 
hacía un día magnífico, aunque encontramos los ríos y torrenteras helados, nos fuimos a dar un paseo y aprovechamos para recoger enebros, aunque estos frutos ya empezaban a estar algo arrugadillos, aún nos hicimos con unos cuantos, por lo que he podido preparar estas galletas de delicado perfume.
 
 
Ingredientes:
 
100 gr. de azúcar
200 gr. de mantequilla reblandecida
1 huevo
350 gr. de harina



 
16 bayas de enebro
 
3 cucharadas de postre de licor de enebros
 
Elaboración
 
Machacar con un triturador de ajos las bayas de enebro, sale muy poquita pulpa, ya que el enebro sin piel ni pipas realmente es poca cosa.
 
Mezclar con la batidora, el azúcar y la mantequilla, cuando hayamos conseguido una crema suave añadirle un huevo ligeramente batido, seguir batiendo, a continuación incorporar la pulpa de enebro y el licor, por último y poco a poco la harina.
 
Terminar de amasar a mano. Hacer una bola con la masa y dividirla en cuatro porciones.
 
Con un rodillo trabajar cada una de las partes entre dos papeles film, dejándolas de un grosor de 7 cm. Si no tenéis rodillo especial con discos de medida, utilizar unas varillas de madera que os podrá hacer cualquier carpintero con el grosor que deseéis. Colocar  las cuatro porciones en la nevera mejor de un día para otro.
 
Una vez haya terminado el reposo darles forma con cortapastas y llevar al horno precalentado a 180º, durante doce minutos. Sacar del horno y dejar enfríar sobre una rejillla. 

 

 

Nota: Si queréis hacer licor de enebros, simplemente mezclar aguardiente con enebros. En una botella llenar hasta la mitad de enebros, añadir una barra de canela y unos granos de café. Dejar reposar en sitio oscuro durante unos cuatro meses, filtrar y ya está listo. Para quien prefiere los licores dulces se le puede añadir azúcar. De este licor conviene no abusar pues podría provocar problemas a las personas que tengan problemas de riñón o de intestino.
 
Fuente: Familiar